Claves para mejorar el aprendizaje
Como padres/madres, tutores o profesores de nuestros hij@s y adolescentes, es muy importante que tomemos la responsabilidad de guiarles y asesorarles en su crecimiento tanto personal como académico, para de esta forma fomentar su desarrollo integral en la sociedad actual.
Muchas veces, como educadores podemos sentirnos perdidos en este rol y es por ello que me gustaría compartir unas claves muy prácticas para que este acompañamiento se convierta en el motor de cambio para que nuestros adolescentes tomen a su vez el timón de su propio crecimiento.
- Dedicar espacios y tiempo para que el adolescente pueda tomar conciencia de sus fortalezas y de sus áreas de mejora, de esta forma estableceremos un punto de partida en el que progresivamente las áreas de mejora se convertirán en nuevas fortalezas y por ende la autoestima se verá reforzada para hacer frente a nuevos retos y situaciones.
- Hablar al adolescente desde la emoción, es decir, permitirles identificar y expresar sus emociones ante los acontecimientos que está viviendo. Hacerles entender que ninguna emoción es "mala", todas las emociones son necesarias y tienen una función primordial en nuestra supervivencia y cruciales para poner límites Preguntarles con preguntas abiertas y que les permitan reflexionar: ¿ Cómo te hace sentir esta situación? ¿ qué crees que estás necesitando ahora mismo? . Por otro lado, tras la identificación y expresión es conveniente enseñarles herramientas y estrategias que les permitan gestionar de una forma saludable sus emociones.
- Sin motivación, no hay aprendizaje. El proceso de aprendizaje comienza cuando en nuestro cerebro se activan diferentes regiones subcorticales y corticales que permiten la focalización en una determinada tarea o estímulo, pero para que estas regiones se activen es necesario que el adolescente se sienta motivado. Una estrategia que podemos usar es que reflexionen acerca de ¿ para qué es importante aquello que están haciendo? ¿ Para qué lo hacen? Con esta pregunta conseguiremos conectar con sus motivaciones y posteriormente con la emoción, sin caer en la trampa de los ¿ por qué? los cuales transfieren la responsabilidad a otros, al pasado o a la excusa.
- Enseñarles un método de organización y planificación, mediante la definición de pequeños objetivos, realistas, motivadores y puestos en el tiempo. Y por otro lado creando hábitos de estudio saludables
- Usar un lenguaje positivo y constructivo. En lugar de mandar deberes para casa o clase , que denotan obligación, sustituirlos por retos de aprendizaje, que muestran acción y motivación. En lugar de regañar, plantearles preguntas que les permitan ponerse en acción.
Espero que estas claves puedan venirte bien, tanto si eres profe como padre/madre. Cualquier consulta, no dudes en ponerte contacto conmigo.
Ruth Alonso, Coach experta en relaciones e Inteligencia emocional