laboratorio para el cambio

La jaula

29.08.2019

Sin darnos cuenta muchas veces vivimos en jaulas que pueden parecer lugares perfectos ya que nos hacen sentir a salvo de los " depredadores" que están acechando fuera, dispuestos a despedazarnos si intentamos salir. Desde luego que imaginar esta escena puede resultar un poco dantesca y podemos llegar a pensar lo que dice el refranero de "mas vale lo malo conocido que lo bueno por conocer" o aquel que reza " Jesusito de mi vida que me quede como estoy...." Nada mas lejos de la realidad.

Las jaulas que podemos encontrarnos a lo largo de nuestra vida (y que yo personalmente he experimentado) están disfrazadas de relaciones personales/familiares o profesionales, de empleos y de creencias que autogeneramos nosotros mismos. ¿Te suena alguna de ellas?

Vivir en esas jaulas puede resultar tentador, porque ¿quien no quiere una vida sin sobresaltos ni cambios perturbadores, sin temor, controlando las emociones? Pero esta situación es un arma de doble filo por dos motivos :

  • Puede ocurrir que la jaula se nos quede pequeña, pero nos de tanto miedo salir fuera debido a las creencias autogeneradas de los depredadores que hay  que terminaríamos viviendo con nuestras alas apretujadas entre los barrotes sin poder desplegar todo nuestro potencial.
  • Que los barrotes de la jaula desaparezcan de la noche a la mañana y nos quedemos a la intemperie, paralizados sin saber cómo desplegar nuestras alas por el miedo a no saber volar ni hacia dónde dirigirnos.

El cambio es parte de nuestra naturaleza vital, de nuestra supervivencia. Cuando nos resistimos a éste es cuando la emoción del sufrimiento puede invadirnos creando en nosotros más inseguridad y ansiedad sentimientos que se apoderan dejándonos a su merced sin (en principio) poder hacer nada. El cambio provoca miedo y el miedo aunque puede parecer una emoción negativa en realidad es una emoción básica para la supervivencia, piénsalo por un instante ¿Qué información quiere darte el miedo cuando lo sientes? , su función principal es avisarte de que tengas cuidado, te protege ante situaciones de peligro y nos hace conscientes de cómo actuar ante experiencias que atentan a tu integridad. El problema aparece cuando esos miedos aparecen como consecuencia de creencias irracionales y están proyectados hacia un futuro que realmente no conoces con certeza.

Para poder gestionar ese miedo futuro es importante saber gestionar los riesgos teniendo en cuenta dos aspectos:

  • La probabilidad real de que ocurra el acontecimiento que nos da miedo
  • El impacto que tendría esa situación si ocurriese.

Para ello te animo a que pienses en esa situación que te da miedo y que te hagas las siguientes preguntas:

  • ¿ Es posible que suceda? , Si la respuesta es NO, el proceso termina aquí , no gastes energía en algo donde la probabilidad que suceda es nula

Si la respuesta es que si , piensa en si esa posibilidad es alta, media o baja , la realidad es que si nunca ha pasado es poco probable que pase. ¿ Qué impacto tendría , como repercutiría en tu dia a dia? ¿ Qué puedes hacer para para pasar de un impacto alto- medio, y de uno medio a uno bajo? 

Los cambios dan miedo pero tu tienes el poder de gestionar ese miedo ejercitando tu inteligencia emocional. No dejes que el miedo te aleje de tu camino y gánale la batalla haciéndole frente ya que cuando esto ocurra, el se hará pequeñito y podrás seguir tu trayectoria. 

Si quieres que te acompañe en este camino no dudes en contactar conmigo

Ruth Alonso, Coach experta en relaciones e inteligencia emocional

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